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Indarki

La gestión del conocimiento ante una crisis energética

Pensando en el 4º principio que enuncié el otro día, se me ocurre que podría haber incompatibilidades con una política restrictiva de patentes y propiedad intelectual. No es la primera vez que relaciono energía y propiedad intelectual, así que os comento lo que se me ha pasado por la cabeza y decidís si lo que digo es una tontería.

Empiezo recordando ese 4º principio: "El ser humano, en cada momento en su historia, será capaz de desarrollar la tecnología suficiente para mantener sus necesidades energéticas." Como decía, este principio es, en cierta forma, opuesto al 1er principio, el del cénit del petróleo. Analicemos algunas de las combinaciones de fe en cada uno de ellos y me quedo con aquellas que asuman un riesgo de crisis energética.

Es inevitable creer en una crisis energética si crees en el 1er principio, pero no me interesa la existencia o no de una futura crisis energética, sino el "riesgo a sufrir una crisis energética". Una gran fe en el primer principio y baja en el cuarto implica un altísimo riesgo (100%). Llamémosle Caso 1.

Sin embargo, aunque no se crea en ese primer principio, si crees el 4º, el de la capacidad tecnología, también existe un potencial riesgo. Me explico: asumes que no va a haber una crisis energética gracias al desarrollo tecnológico. Este será el Caso 2.

Empiezo con el Caso 1, el escenario más catastrofista, ese en el que "crisis" significa "drama", el significado más popular. Hay opiniones para todos los gustos sobre cómo será esa nueva época. Y estaríamos hablando de algo muy serio, ya que una sociedad en crisis energética implica una sociedad en crisis. ¿Colapso? ¿Era Mad Max? ¿Época del "sálvese quien pueda"? Puede que la tecnología no haya sido capaz de suministrar la energía suficiente demandada por la sociedad, pero la tecnología va a ser trascendental para la supervivencia de las comunidades. Unas saldrán adelante y otras no. Su supervivencia como comunidad fundamentalmente dependerá dos aspectos, de su capacidad económica y de su capacidad tecnológica. La combinación de ambos aspectos definirá la capacidad de adaptación al nuevo medio. Me inclino a pensar que la capacidad tecnológica será más relevante, pero es sólo una opinión. Para imaginar este futuro me vale con saber que es uno de los dos factores fundamentales. Y ahora, recuperamos el factor "propiedad intelectual y patentes". Si partimos de una situación previa en la que hay una política restrictiva, el acceso al conocimiento tecnológico es limitado. Después de una situación de crack, ese conocimiento quedaría, en el mejor de los casos en manos de unos pocos. Incluso, pudiera ser que se perdiese si el grupo de personas que ostenta ese conocimiento, desaparece o se disgrega. En un futuro castastrofista así imaginado, la devolución al dominio público del conocimiento técnico energético sería una de las formas (¿la única?) para dar herramientas de supervivencia a las sociedades post-crisis energética.

Ahora, vamos con el Caso 2. En el que "crisis" toma su significado más académico: "cambio". Es complejo, no creemos en una crisis energética catastrófica por que vamos a tener capacidad tecnológica para ello, pero ¿todos? Una cosa es que haya capacidad tecnológica pero otra muy diferente es que dicha capacidad esté a disposición de todos. Si estamos en un escenario de propiedad intelectual y patentes restrictiva, el acceso al conocimiento energético se realiza pasando por taquilla. Quien no tiene dinero, no tiene capacidad. Si creemos que la tecnología es la que nos salvará de la crisis energética, la sociedad humana no entrará en crisis, pero sí lo harán muchas sociedades que no puedan pagar la tarifa. La devolución, nuevamente, o una política flexible de concesión de uso de propiedad intelectual y patentes serán las únicas maneras de salvarse de una infinidad de pequeñas situaciones de crisis energética.

He planteado 2 casos, pero puede haber más. En ambos he asumido el riesgo a una crisis energética o el factor fundamental de la tecnología para evitarla. Por supuesto, los hay que no creen en ese tipo de situaciones de crisis o que habrá otros elementos para salvarlas; mecanismos del libre mercado, por ejemplo.

Simplemente son reflexiones que mi inclinan a pensar que me sentiría más seguro si hubiese una política menos restrictiva de propiedad intelectual, aunque sólo sea por evitar o reducir los daños de dos hipotéticos futuros.

Me produce una enorme frustración que la industria discográfica y cinematográfica vaya a ser la que marque, en gran medida, la futura e hipotética capacidad de reacción social. Y será así si consigue grabar en la mentalidad de todo el mundo que una creación intelectual es un bien a disposición exclusiva de su autor. ¡Como si la música y el cine fuese la única creación intelectual! Pues mi lector de mp3 funciona con batería recargable. Veremos si en el futuro lo podré cargar y escuchar música.

3 comentarios

indovinello -

Hace tiempo pensé en abrir un hilo en el foro de CrisisEnergética que va de lo mismo. Y, qué casualidad, buscando información doy con este post! Si os interesa:

http://www.crisisenergetica.org/forum/viewtopic.php?forum=9&showtopic=23620

Saludos.

indarki -

> La energía es una cosa más simple, menos dramática si quieres. Lo pasaremos mal, pero no nos moriremos...

Depende del lado en el que nos quedemos...

awifredo -

El SIDA en occidente es una enfermedad casi crónica, en Africa es muerte segura, simplemente porque no pueden pasar por caja. Mientras la industria farmaceutica especule con bienes de primera necesidad como los medicamentos. Sería una auténtica aberración que se encontrara la forma de curar, pongamos el cáncer, y no todos pudieran optar a ella sin pasar por caja. Y en realidad es lo que va a suceder. O peor aún, que la vacuna del SIDA no se encuentre porque las farmaceuticas ganan más teniendo enfermos crónicos tomando pastillas 30 años que poner una vacunita y listo.

La energía es una cosa más simple, menos dramática si quieres. Lo pasaremos mal, pero no nos moriremos...