Blogia
Indarki

'Paradogías' de la conexión fotovoltaica

Hago de pequeña caja de resonancia para algunas de las ideas y críticas que lanza Eduardo Lorenzo en su última entrega de retratos de la conexión fotovoltaica que firma en el número de enero de Era Solar.

Empiezo con algo de mi cosecha... la energía solar fotovoltaica, tal y como está la actual reglamentación española, sufre de "paradogía" (dícese de la enfermedad inventada, por la que te sientes en una aparente contradicción). Resulta que si hay un apagón en la red, te quedas sin energía eléctrica aunque tengas una estupenda instalación fotovoltaica funcionando (es decir, todo va bien y hay sol). ¿Cómooooo? ¿No me sirven de nada los paneles? Para salir del paso durante un apagón, no. ¡Eso es absurdo! .... ¡Exacto! Ahí está la paradogía (que no contradicción, salvo por apariencia), porque para que tú cobres tu preceptiva prima, toda la energía producida por los paneles tienen que ser vertidos a la red y todo tu consumo, por lo tanto, se tomará de la red. Si no hay red, ni contribuyes con electricidad (aunque estés en condiciones de hacerlo) ni consumes. Te quedas mudo y sordo.

La lógica dice que una instalación fotovoltaica conectada a red debería funcionar más o menos igual que una aislada, pero donde en la aislada hay baterías, en la conectada a la red, se encuentra, precisamente, la red. Con la red, desde el punto de vista técnico, únicamente te relacionarías con los excedentes de consumo o de producción.

El efecto inmediato es que en caso de apagón de la red, si tus paneles estan producciendo, tu prodrías consumir. Si consumes más de lo que produces, te salta la protección y tienes que apagar algún electrodoméstico y volver a levantar la protección. Sin embargo tiene otro efecto que me parece muy interesante: descargas la red y ya no necesitas gestionar técnicamente en ella el 100% de tu producción más el 100% de tu consumo, sino el balance (ya sea positivo o negativo). El tratamiento del 100/100 queda únicamente para el apartado administrativo/económico, pero no en la gestión técnica de la red.

Y aquí es donde voy al artículo de Eduardo Lorenzo donde afirma, y yo estoy de acuerdo, que la generación distribuida que favorece la fotovoltaica mola porque acerca la producción al consumo y con ello se reducen las pérdidas en distribución. El caso es que, en España, casi el 20% de las instalaciones fotovoltaicas pertenecen a industrias o comercios, muchos de los cuales, por su nivel de consumo, se conectan a la red en media tensión (con tarifas más favorables) y transforman ellos mismos a baja. Pero, y ahí está la clave, la fotovoltaica produce en baja y por reglamento, se tienen que conectar a la red.

Por lo que, el recorrido que haría la electricidad fotovoltaica, supuestamente más próxima al consumo, es salir de la instalación fotovoltaica, entrar en una red de baja tensión, subir a media tensión, circular por la red de media, entrar en la instalación de la industria (media tensión), pasar a baja tensión y ser consumida... ¿Verdad que es un desperdicio de pérdidas cuando se podría conectar directamente la instalación fotovoltaica a la red de baja de la propia industria?

2 comentarios

McLera -

Buenas y santas,

hablando de generación en baja tensión .... sabes como esta el tema del consumo en baja tensión?.

Me refiero a cual es el estado de la tecnología de aparatos domésticos de baja tensión que permitirían conectar al nivel generado por los paneles ...

Un saludo

josikko -

Hola de nuevo! Me parece muy interesante el artículo y tu opinión... y estoy totalmente de acuerdo.

Por si puedo aportar algo respecto al tema, estoy leyendo ahora mismo un artículo en la revista PHOTON sobre una modificación en la ley alemana de renovables (EEG) que permite o bien consumir la electricidad fotovoltaica directamente en casa o bien verterla a la red. El artículo también habla de los aspectos técnicos. A ver si el lunes puedo poner algo.

Saludos